Vuelve el calor, ¿están los ancianos preparados?

Parece que el frío nos deja de manera definitiva, son días de sol y jardín en nuestra residencia, pero ahora que aún el calor no es tan sofocante como será en julio o agosto merece la pena recordar algunos consejos para que nuestros ancianos estén protegidos durante todo el periodo estival.

Lo primero que debemos recordar es que debemos evitar, en la medida de lo posible, el sol de las horas entre las 14:00 y las 17:00. En esas horas es cuando los rayos del sol influyen de manera más duradera y peligrosa sobre la piel de las personas.

Además, es recomendable que nuestros mayores lleven siempre protección solar para la cara, así como protección solar para el resto del cuerpo. De esta forma siempre estarán protegidos frente a quemaduras o enfermedades que el sol produce.

Por último, no debemos olvidar el peligro que tienen los rayos de sol sobre la cabeza, pues muchos de nuestros ancianos carecen de pelo por esa zona; por lo que los rayos inciden directamente sobre la cabeza pudiéndoles producir quemaduras o insolaciones. De este modo, siempre es recomendable ponerse crema también en la cabeza, así como llevar algún tipo de gorra o sombrero.