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Cada año, el 26 de julio, se celebra el Día de los Abuelos, un día importante para homenajear a nuestros mayores por su paciencia, sabiduría y su complicidad. En esta fecha se recuerda el santoral a Santa Ana y San Joaquín, padres de la Virgen María y, por tanto, abuelos de Jesús.

¿Por qué se celebra el Día de los Abuelos?

El Día de los Abuelos es un día para el reconocimiento y agradecimiento por una labor de la que disfrutan con agrado y con la que se muestran siempre dispuestos, la labor de cuidar de sus nietos sacrificando su vida personal por la conciliación familiar. Y es que, los abuelos no sólo colman de caprichos a los nietos y les consienten mientras no están sus padres, sino que son los encargados de formar parte de la educación de los más pequeños.

Las circunstancias económicas, laborales y sociales han convertido la figura de los abuelos, en los auténticos padres de los pequeños por todo el tiempo que pasan con ellos. Gracias a su cariño y su experiencia nos hacen crecer con su sabiduría y compresión.

Además, en la actualidad los abuelos disfrutan de su papel en una edad más joven que hace décadas y por lo tanto, tienen una mejor calidad de vida, lo que les hace compartir momentos increíbles con sus nietos. El parque sigue siendo una de las vías de escape a la que acudir con los menores, y ni la televisión ni las nuevas tecnologías puede luchar contra ello.

También, debido a la crisis que afecta a la mayoría de hogares españoles, el papel de los abuelos ha cambiado, teniendo que sacrificar su pensión para ayudar a los hijos.

Por todo esto, se celebra el Día de los Abuelos, una jornada dedicada a agradecer todos el cariño que nos dan y todos los esfuerzos que realizan por la familia. Compartir el tiempo con ellos, escuchando sus vivencias, preguntándoles cosas, les aporta esa vitalidad extra que necesitan con el paso de los años y en nuestra residencia para mayores en Madrid sabemos como hacer para que nuestros mayores se sientan bien todos los días del año.