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La risoterapia es una de las terapias alternativas que mejoran la calidad de vida de las personas mayores. Como todos sabemos reírse es un acto de naturalidad y espontaneidad, que vamos perdiendo cuando nos hacemos más mayores. De hecho, un niño es capaz de reírse 300 veces de media al día, mientras que los adultos podemos reírnos de 15 a 100 veces de media al día.

Por ello, es necesario cambiar este aspecto e intentar que nuestros mayores se rían mucho más. La risoterapia no va a hacer que desaparezca ninguna enfermedad, pero sí que puede mejorar el estado de ánimo de las personas enfermas y de las personas mayores en general.

Sin embargo, las personas mayores que padecen alguna enfermedad deberían practicar más esta terapia alternativa, con el fin de mejorar su bienestar y por lo tanto, su salud en general.

Beneficios de la risoterapia

¿Sabías que cuando nos empezamos a reír se activan más de 430 músculos a la vez? Y no solo eso, sino que los pulmones trasladan 12 litros de aire, cuando lo normal es que solo muevan 6 litros y por lo tanto, como consecuencia, el corazón de fortalece porque le llega mayor riego sanguíneo.

Sin duda, la risoterapia solo nos aporta beneficios, ya que también nos ayuda a disminuir el estrés y la ansiedad. Y al disminuir estas sensaciones las personas mayores empiezan a ser más positivas y proactivas a la hora de solucionar problemas del día a día.

A través de la risa, liberamos endorfinas, que son las llamadas hormonas de la felicidad. Éstas se encargan de que las personas se encuentren en un estado de bienestar con el fin de que afrontemos la vida de una manera distinta.

En nuestra residencia contamos con un servicio especializado en asistencia social, en el que realizamos todo tipo de actividades con nuestros mayores para que encuentren su bienestar.